A través de un proyecto de resolución que llevó las firmas de múltiples diputados y diputadas que se opusieron a los acuerdos con el FMI en 2018, 2022 y 2025, Máximo sentó una posición política firme: si el gobierno pretende endeudarse de forma directa con el Tesoro de los Estados Unidos, deberá someterse a la Constitución y las leyes nacionales, presentando cualquier acuerdo al Congreso para su tratamiento. De lo contrario, será nulo y no se reconocerá.