Hoy nos toca despedir con profundo dolor al compañero Juninense Guillermo Racco. Un militante de la primera hora, de esos que cuando se relanzó la organización en Junín fue de los primeros que, junto a su familia, se sumó a transformar las realidades injustas como nos enseñaron Néstor y Cristina. Y es que cuando uno incorpora la militancia como forma de vida, la compañerada se convierte también en familia.

Y aquí estamos, todos y todas, sosteniéndonos una vez más porque sabemos que el abrazo colectivo es sanador y es como Guille nos quisiera ver: juntos y juntas acompañando a Caro y Sophi en este momento tan difícil.

Guille fue un militante todoterreno, siempre dispuesto a dar una mano, creyendo a ultranza en Cristina (cuando había muchos y muchas que miraban para otro lado), confiando en quien nunca traiciona al pueblo, bancando en las malas y celebrando en las buenas. Siempre de pie, siempre en el barrio.

Así te vamos a recordar, querido compañero, con la dignidad de tus pasos y la certeza de tus sueños, que son también los nuestros.

Siempre presente en nuestra militancia, te vamos a extrañar.