Las Invasiones Inglesas fueron un acto de resistencia heroico del pueblo de la Ciudad de Buenos Aires frente a Gran Bretaña, la segunda potencia mundial de la época. Se organizaron milicias, trincheras y barricadas; se arrojaron piedras y grasa hirviente desde los balcones: esta defensa popular no sólo avivó el espíritu de la Revolución de Mayo y de nuestra Independencia, sino que forjó en nuestro ADN nacional la convicción de la lucha por nuestra soberanía y nuestra dignidad.