En días anteriores, el Centro Cultural tuvo un rol muy activo acompañando a bomberos, bomberas, vecinos y vecinas.
Autoridades de los diferentes niveles del Estado, destacándose la presencia de la Diputada Nacional Gabriela Estévez, llegaron a la localidad a raíz del ecocidio por los incendios de la región y coordinaron esfuerzos con intendentes, legisladores, legisladoras, defensa civil y el Subsecretario de Asistencia Crítica de la Nación.
Mientras las compañeras y compañeros estaban trabajando conjuntamente con las bomberas y bomberos para mitigar los incendios, estaban atentando contra la sede, amedrentando y hostigando. En otras palabras, desplegando su odio irracional.
Este hecho de intolerancia y violencia política estuvo destinado a atacar nuestra labor militante en medio de un incendio sin precedentes en la provincia.
Estas repudiables acciones no nos detendrán. Por el contrario, seguiremos militando y trabajando para que el Estado esté presente, gestionando y acompañando a las familias damnificadas en estos momentos tan difíciles.
El compromiso y solidaridad que identifica a este espacio seguirá en pie, presente y constante.
Repudiamos este acto de cobardía. El odio y la violencia son el peor camino.
El amor vence al odio y es el mayor legado que tenemos y honramos.