El sábado pasadas las 21 horas a miles de vecinos de La Plata se les apagó la luz para nunca más volver. Cuando comenzó el corte, se vieron afectados 50.000 usuarios. A 90 horas del inicio del apagón, todavía quedan más de 60 mil personas sin energía eléctrica. La Defensoría de la Provincia de Buenos Aires estima las pérdidas en más de mil millones de pesos.
Dentro de las localidades afectadas se encuentran City Bell, Gonnet, Villa Elisa, Hernández, Arturo Seguí y Gorina; repercutiendo no sólo en la vida de las familias sino también en la actividad comercial e industrial de la ciudad.
Cabe destacar que en la provincia de Buenos Aires un solo grupo económico concentra las empresas de distribución de energía eléctrica por definición de Macri y Vida. Se trata de DESA, de Luis Rogelio Pagano, un empresario muy cercano al gobierno que durante la gestión actual adquirió Edelap, Edea, Eden y Edes; monopolizando la distribución eléctrica, violando todo principio de competencia.
Los vecinos y vecinas que se ven afectados por el corte de luz y en consecuencia de agua; no cuentan con un plan de contingencia ni de la empresa ni del municipio ni de la provincia de Buenos Aires. El intendente Julio Garro y la gobernadora María Eugenia Vidal, que llegaron al gobierno simulando cercanía con la gente, no recorrieron las zonas afectadas siquiera para disminuir el desamparo que sufren los y las platenses.
Se estima que 30 escuelas se encuentran sin clases, a lo que debe sumarse la cantidad de niños, niñas y adolescentes que no están pudiendo ir a sus instituciones educativas por la situación en la que se encuentra su grupo familiar.
Por este motivo, senadores y diputados provinciales de Unidad Ciudadana y del Frente Renovador, realizaron un reclamo a la gobernadora Vidal para que finalice la concesión con la distribuidora, en función de la evidente desinversión que llevan adelante. Al tiempo que se le exigió que realice las gestiones necesarias para devolverle la electricidad a los platenses y efectivice un plan de contingencia acorde a la terrible situación.
En este contexto, la presidenta del bloque de diputados bonaerenses de Unidad Ciudadana y precandidata a intendenta de La Plata Florencia Saintout denunció que “Durante estas noches, que han sido noches cerradas, no hemos visto patrulleros, ambulancias, delegaciones repartiendo agua. No hemos visto en las noches ni en los días agentes de tránsito. Más bien ha habido una desaparición del Estado municipal, trayendo generadores que en muchas ocasiones ni siquiera funcionan”.
Del mismo modo, la jefa del bloque de senadores de Unidad Ciudadana, Teresa García reveló: “Rogelio Pagano es amigo del presidente Mauricio Macri y es parte de la sociedad de distribución de energía en el país junto con Mindlin y Caputo. Estos dueños de empresas, que tienen el derecho a intentar percibir ganancias descomunales, lo hacen con la mirada ausente de un Estado cómplice y con la ausencia total de los organismos de control. Así los bonaerenses no tienen ninguna defensa porque no los defiende la Gobernadoraˮ.
La Defensoría del Pueblo bonaerense pidió exigió a la empresa y al gobierno de la provincia de Buenos Aires el pago de una indemnización en concepto de resarcimiento de 8 mil pesos por día para usuarios particulares y de 25 mil pesos en el caso de los comercios, independientemente de los reclamos que puedan realizarse ante la empresa y el ente regulador en caso de haber sufrido mayores perjuicios a partir del corte.
Ante el desamparo, las familias realizaron numerosos cortes de calle para intentar visibilizar lo que los medios concentrados de comunicación no reflejan: una situación caótica que se ve acrecentada por la falta de un estado presente que hubiera podido evitar los saqueos, robos y situaciones de extrema tensión que no hacen más que empeorar el desolador panorama.
Edelap, la empresa que tiene la concesión del servicio eléctrico en la capital bonaerense, promete que la finalización de las obras que permitirán la provisión del servicio a los afectados concluiría recién el jueves por la noche. En el día de la fecha, se conocieron multas realizadas por parte de la Provincia de Buenos Aires a la misma por tan sólo 600 mil pesos en concepto de deficiencias previas al corte actual ante la falta de información que brindaba al Organismo de Control de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires (OCEBA), lo cual evidencia que ya se podía anticipar la fragilidad de la conexión de los vecinos y vecinas. Una cifra por cierto irrisoria para una compañía que en un año obtuvo ingresos por 8.880 millones de pesos.
En un contexto de brutales tarifazos, el grupo que monopoliza las distribuidoras energéticas, no realizó las obras necesarias para garantizar el derecho a un servicio elemental. La falta de un organismo contralor y el direccionamiento de las concesiones a amigos del presidente Macri y la gobernadora Vidal, evidencia la ausencia total del Estado para satisfacer las necesidades del pueblo; sino que por el contrario, sólo se ocupa de seguir enriqueciendo a los grupos económicos concentrados de los cuales forman parte los gobernantes. Un gobierno de ricos para ricos. Entre Todos podremos sacarlos.
