La designación de Luis Miguel Etchevehere es la prueba cabal de que hoy gobiernan los patrones del mal, entre los que se encuentra este hombre que es  investigado por la Justicia por evasión tributaria, violación de ley penal cambiaria, administración fraudulenta y reducción a la servidumbre.  Y eso no es todo. El ahora ministro es también acusado penalmente de cometer el delito de administración fraudulenta, junto a sus hermanos Arturo Sebastián y Juan Diego Etchevehere y la madre de los tres, Leonor Marí­a Magdalena Barbero Marcial.

Pero además, el nombramiento de Etchevehere tiene un hilo conductor consecuente con la histórica connivencia de la oligarquí­a patronal con los gobiernos de derecha. No es la primera vez que la Sociedad Rural gobierna, por el contrario, ya supo ser beneficiaria de la conquista del desierto que encabezó Julio Argentino Roca para el exterminio de los pueblos originarios en el sur de la Patria. Son los mismos que impulsaron la matanza de obreros en las huelgas de Santa Cruz en la conocida “Patagonia Trágicaˮ.

Nada es casual por estos dí­as. Desde sus orí­genes, la Sociedad Rural se caracterizó por brindar su apoyo explicito hacia los golpes de Estado de 1930-1955-1966 y la última dictadura cí­vico militar de 1976

A punto tal que, entre los antecesores de Etchevehere, se encuentra Martí­nez de Hoz, padre del ex ministro de Economí­a de la última dictadura cí­vico militar.

El actual ministro de Macri se viene preparando hace rato. Como regente de esta asociación patronal se opuso fervientemente a las medidas populares del gobierno anterior y tuvo un rol clave a la hora de convocar al lockout patronal del año 2008, que desabasteció al pueblo argentino y realizó los más graves cortes de ruta de los últimos tiempos.  

Por otra parte, el año pasado, de la mano de Macri y del Momo Venegas, la SRA logró disolver el RENATEA, organismo creado por Cristina Fernández de Kirchner   para funcionar como complemento del Estatuto del Peón Rural y ampliar los derechos de los trabajadores rurales.

Este   organismo registró a 154 mil trabajadores, otorgó 15 mil coberturas por desempleo, se encargó de proteger a personas ví­ctimas de trata, abrió puntos de alfabetización, brindó talleres a los trabajadores migrantes sobre sus derechos y llevó adelante los operativos de fiscalización que permitieron detectar  trabajadores en condiciones de esclavismo.

Cabe recordar que durante la existencia de dicho organismo se produjeron dos graves episodios detectados por trabajadores en extrema precariedad en los campos del ex gobernador misionero Ramón Puerta. ¿Dónde se produjeron? En una finca del actual ministro, Luis Miguel Etchevehere.

Es más que evidente. Hace hace rato vienen preparando el terreno. Apenas asumió Cambiemos, un fallo de la justicia declaró inconstitucional la creación del Renatea y dispuso todo para que el gobierno ponga en marcha nuevamente el RENATRE, organismo privatizado encargado de regular las relaciones laborales en el sector rural. Para que quede claro: el Renatre, desde una concepción neoliberal, se encarga de asignar a las patronales y al mismo sindicato el control de las relaciones laborales. Tal es así­ que los peones explotados deben realizar su denuncia en los locales de la UATRE   o de la mismí­sima Sociedad Rural. Es decir, deben realizar la denuncia de explotación a su mismo explotador.  

El Ministerio de Agricultura, Ganaderí­a y Pesca pasó a llamarse   Ministerio de Agroindustria, mediante un decreto avanzaron sobre   la extranjerización de la tierra, pasando por alto que continúa sin reglamentarse la ley de agricultura familiar sancionada durante el gobierno de Cristina. De esta manera, continúa el exceso de beneficios para la oligarquí­a sojera.

Dí­a a dí­a crece el desfinanciamiento del área destinada a apoyar y fomentar a las pequeñas producciones agrí­colas familiares, campesinas e indí­genas.   Desde el inicio del gobierno de Cambiemos uno de los claros sectores privilegiados es el de las patronales agrarias, vinculadas a la gran producción y a la exportación, mientras que la pequeña producción quedó de lado. En cambio, la población rural es la mas afectada.

En ese marco, la asunción de Etchevehere es una clara fotografí­a del obsceno poder de los verdaderos patrones del mal. Es la imagen de Benetton, Lewis,   Blanco Villegas, de Peña Brown, sentados en una mesa trazando alambrados sobre el territorio nacional. Esta oligarquí­a terrateniente ve en el triunfo de Macri la oportunidad histórica de acrecentar sus negociados y ganancias a costa de los trabajadores.

Solo con unidad y organización será posible frenar este salvaje modelo de unos pocos e impedir que sigan entregando nuestros recursos a los buitres y caranchos de siempre.