En el 2015, el Plan de Finalización de Estudios Secundarios encontró en la manzana 22, casa 207, sitio donde se encuentra “La Escuelitaˮ, un lugar en el cual estaban dadas las garantías para lograr el objetivo de hacer cumplir el derecho de quienes quieren estudiar. Eran tiempos de un Estado nacional presente, que levantaba las banderas del acceso igualitario al conocimiento, con un 6,5 por ciento del PBI destinado a educación, con creación de universidades, con infraestructura escolar, con el Progresar y la AUH. “La Escuelitaˮ fue parte y testigo de todo ello, pero también lo fue de la falta de vacantes y del acceso restringido a la educación a los sectores más vulnerables que propiciaba el macrismo en la ciudad y hoy, lamentablemente, se puede ver cómo esa política cobra fuerza en todo el país y especialmente en la provincia de Buenos Aires.
“Algunos se preocupan por los cuadernos de un chofer, nosotros nos preocupamos por los cuadernos de los pibes y de las pibas del FINES para que puedan terminar la escuela, siempre fue asíˮ, aseguró Andrés “Cuervoˮ Larroque. “Qué precio tiene esa emoción que se ve, es impagable y muchos no lo entienden, no lo ven, tienen el corazón cerrado, frío, no lo pueden comprender, no lo comprendió Macri siendo jefe de gobierno, que desalentó el FINES, por eso este programa se lleva acá con ayuda de la Universidad de Avellaneda y no por iniciativa del Gobierno de la Ciudad. No lo entiende Macri presidente, que desfinancia el FINES, un programa que permitió que 800 mil personas obtengan el título secundario y primario tambiénˮ aseguró.
Para el festejo de los 20 años de “La Escuelitaˮ se acercaron muchos de los militantes de la primera época que recordaron anécdotas y al querido “Toscasˮ padre de Fabián, actual referente del Frente de Villas de La Cámpora, quien junto a un grupo de jóvenes, entre los que se encontraba el Cuervo, pensaron y llevaron adelante la militancia en Villa 20 en tiempos duros, cuando el neoliberalismo golpeaba fuertemente y la crisis política, social y económica del 2001 comenzaba a atacar a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad.
En sus 20 años de historia, “La Escuelitaˮ fue testigo de la historia social y política de nuestro país, siempre acompañando a los vecinos del barrio. En el lugar se da almuerzo y cena a casi 500 personas, hay apoyo escolar, asesoría jurídica y se debate sobre la urbanización del barrio en forma participativa, construyendo política por y para la gente de “la 20ˮ. Por ello para este festejo se acercaron varios dirigentes, muchos de ellos militantes de “La Escuelitaˮ como Mariano Recalde, Paula Penacca, Javier Andrade, Laura Alonso, Miguel Funes, Jorge Romero, Luana Volnovich, Mariana Larroque, Lucía Portos y el “Cote” Rossi.
“Nunca van a entender lo que significa un Estado al servicio de la gente, un Estado que tiene una definición políticamente clara que no es neutral, pero también un Estado que entiende que debe coordinar con la organización que el pueblo se da en cada lugar, eso es lo que nos enseñaron Juan y Eva Perón y que Néstor y Cristina volvieron a poner en el centro de discusiónˮ afirmó Larroque. Y desde La Escuelita hace 20 años lo pone en práctica, con militancia, con organización y con el mismo amor y las mismas convicciones que el primer día.
