Ari era un apasionado de lo que hacía y sentía. Militaba el proyecto nacional y popular de Néstor y Cristina en cada uno de los ámbitos de su vida. Y no dudaba a la hora de manifestar a viva voz ˮ“a quien fuera y donde fuese- sus ideales y convicciones.
Nunca le sobró nada. Incluso tal vez le faltó. Pero no le importaba, todo era para el otro.
Ari nos hizo mejores.
Sus compañeros recordaremos aquellas noches que nos encontraban discutiendo política durante horas, como una forma de afianzar y sellar el compromiso, el compañerismo y la amistad. Vamos a recordar sus mensajes a las 7 de mañana con las noticias que consideraba indispensables para nuestra información y formación.
Por su docencia constante en la lucha contra el HIV, por todas esas horas que le dedicó a los pibes yendo a sus colegios a enseñarles a cuidarse, pero sobre todo a quererse, Ari dejó una huella en cada uno de nosotros y de los que lo conocieron.
Hoy tus compañeros tenemos el duro desafío de seguir sin vos. O mejor dicho, con vos en nuestro recuerdo y en nuestra militancia diaria, así como con Néstor, con Iván, con Chicho, con Rolo y con tantos otros.
Hasta la victoria, compañero!
Te vamos a extrañar mucho.
Tus compañeros de La Cámpora