Vengo escuchando hoy hablando de las formas, del diálogo y el consenso. Quien les habla, muchas veces por muchos de ustedes, fue agredido constantemente sin siquiera haber escuchado una vez algo. Peroˮ¦ pasa, pasa. Cosas fuleras. Aceptadas las disculpas también por el diputado que las hizo. También no puedo dejar de mencionar y recordar un orgullo muy grande que tiene uno porque muchas veces aprendemos desde los ejemplos. El ejemplo de Cristina homenajeando al presidente Raúl Alfonsí­n en vida marca también cuál es nuestro espí­ritu en estas cosas. Es muy bueno homenajear a alguien en vida. Hoy a mí­ me tocó y me llena de orgullo también que muchos diputados de la oposición recordaran a Néstor Kirchner y cómo negoció la reestructuración de la deuda. Lamentablemente el homenaje llega tarde en ese sentido, pero también vale y también llama a que pensemos muy bien cómo lo manejamos, cómo agredimos. Serí­a muy fácil para mí­ hoy chicanear, nombrar a empresarios amigos del Presidente, serí­a facilí­simo. ¿Suma? ¿Suma? ¿Le saca problemas a la gente o le sumamos más? Cuando los últimos dí­as se producen diferentes hechos, o caen las balas sobre una compañera, despedida cinco dí­as o seis dí­as antes; cuando se le dice grasa militante al que piensa diferente, es muy difí­cil a veces comprender que se venga acá y entre nosotros le cambiamos las formas y luego afuera veí­amos este tipo de situaciones. Decí­a el presidente Alfonsí­n, un parrafito que leo, sé que están muy celosos con el tema de la lectura: “Si la polí­tica fuera sólo el arte de lo posible, serí­a el arte de la resignaciónˮ. Miren, yo les puedo asegurar que sé muy bien que no es fácil gobernar, lo sé porque a Néstor siempre le tocó asumir en condiciones totalmente desfavorables y mucho peores, infinitamente peores de las que ustedes hoy gozan a la hora de recibir el gobierno pasado el 10 de diciembre. No quiere decir que el paí­s que les dejamos es perfecto, pero sí­ pareciera que las crí­ticas que recibimos las hicieron dirigentes perfectos. Es extraño, es extraño porque a partir del 25 de mayo del 2003 lo que uno pudo entender, ver y aprender durante esos dos años fue cómo se negociaba, y en las más absolutas de las soledades muchas veces. Se negociaba con las privatizadas presionando por tarifazos, con un sector del PJ que reclamaba represión para controlar la protesta social mientras nosotros sacábamos las armas de la cartuchera a los policí­as. Es inexplicable entonces que si hablamos de una gran herencia recibida, del peso que puede estar cayendo sobre nuestro pueblo por nuestro mal gobierno, ahora le exijan que no pueda protestar y en cinco minutos lo quieran correr de la calle. ¡Déjenlo! Si es todo tan malo lo que se recibió, déjenlo, conténganlo, porque eso fue lo que hicimos nosotros a partir del 25 de mayo del 2003. Quiero que sepan que estas crí­ticas están hechas desde la humildad de saber lo complicado que es gobernar. Yo no vengo a dar lecciones de nada pero tampoco las quiero recibir. Creo que muchas veces cuando se discuten estas cosas, te caldean los ánimos y está bien, también es pasión y ojalá que esas gradas que por algo están construidas tuvieran gente, militantes de sus partidos si quieren, no hay problema, pero que no estuviera la gente afuera y estuviera adentro como es lo que tenemos que empezar a hacer (aplausos), y como nosotros creemos que tiene que ser un gobierno. Yo noˮ¦ no quiero extenderme mucho porque suscribo muchas de las palabras, todas, que han dicho mis compañeros de bancada. También he escuchado atentamente desde el recinto y también desde la “oficinaˮˮ¦ que veremos qué es lo que pasa, peroˮ¦ he escuchado y he aprendido. A mí­ no me molesta escuchar, no es algo malo, tenemos que aprender a no enojarnos, porque es lo que ustedes nos pidieron durante mucho tiempo. Y resulta ahora que esa humildad que nos reclamaban la han olvidado. No la olviden, no repitan nuestros errores entonces. Los he escuchado hablar que los bancos ganaron como nunca con nosotros. Bueno, ¿qué van a hacer? ¿Van a seguir ganando como nunca? Van a repetir nuestros errores, como una especie de la teorí­a del error permanente. Uno viene y trata de aportar una mirada más, de sumar, porque es imposible olvidar también que en la segunda reestructuración del año 2010 esta solidaridad que reclamaron todos hoy no la pusieron en práctica. Dejaron al Gobierno sin presupuesto, y un gobierno sin presupuesto fue capaz también de ir y sumar al 18% más de acreedores hasta completar el 92,5, 93% de los acreedores, en una situación económica mundial que habí­a estallado en el 2008, en un paí­s que en el 2009 tení­a 450 mil Repro. Porque lo importante era que no se rompiera el ví­nculo entre el trabajador y su empresa, porque la historia de la Argentina con la desocupación fue demasiado dura. Entonces creo que deben comprender que la negativa a acompañar este proyecto no se trata de una postura, como quisieron hacer ver, si es la banderita, chauvinismo, patria o buitresˮ¦ creo que es un poco más profundo. Escuché atentamente al Presidente electo cuando dijo que si se equivocaba o si nosotros observábamos un error, se lo marcáramos. Podemos estar equivocados o no, pero entendemos que es un error, y tenemos la libertad de hacerlo, sin eso implicar que se pongan palos en la rueda. Yo sinceramente creo que lo que le estamos pidiendo es que vayan y negocien mejor, no es más que eso. Es el 7%. Que no haya tanto apuro, que no cedan tan fácil a la extorsiónˮ¦ Si quierenˮ¦ ¿querés que termine? No, porque como nunca hablé yˮ¦ Gracias, gracias sr. Presidente. Bueno, la verdad que lo que querí­a expresar esto y querí­a terminar con que a 70 años de Braden o Perón, conozco muchos de los integrantes de la bancadas del Frente Renovador y de Justicialistas, no digan Braden; que podemos negociar mejor todos juntos, que a 200 años de la independencia no digamos dependencia. Pero esto no implica chicanas, no los quiero chicanear, sino que podemos negociar mejor. Si son mejores que nosotros, yo los he visto siempre en los estudios de televisión, son mejores que nosotros. Háganlo, lo estamos esperando, hay un pueblo que espera. No quiero referirme a los despidos ni nada por eso, sé que es muy difí­cil gobernar Sr. Presidente, y la verdad que le agradezco, discúlpenme, sé que me excedí­ un poco, le agradezco y sinceramente después de doce años nadie, por lo que nos costó, por lo que les costó a todos los argentinos, porque lo que hizo Néstor Kirchner y Cristina Kirchner fue poner en valor el esfuerzo de los argentinos, porque la deuda la pagaron los argentinos, el Gobierno lo que hizo fue poner en valor eso. Se le pagó al FMI 9 mil millones de dólares y se enojan porque le pagamos al FMI, y no se enojan con los que contrajeron la deuda con el FMI. Entonces creo queˮ¦ ya termino, ya termino. Creo que la verdad que nunca, por lo menos en nosotros y en particular uno, va a haber palos en la rueda, porque todos los avances que hubo costaron mucho. La verdad que queremos un paí­s grande como también lo quieren ustedes y tenemos que lograr sintetizar eso. Nada más y muchas gracias Sr. Presidente y perdón por el tiempo tomado.