Como para que no nos olvidemos de quienes son realmente los jefes de la oposición al gobierno, cada tanto las editoriales del diario La Nación nos recuerdan de forma directa y llana que para ellos “con los militares estábamos mejorˮ. Suponemos que para no ser tan reiterativos, a las editoriales sinceras las mechan con otras más “progresˮ en las que hablan de medio ambiente, libertad de prensa o simplemente de “buenos modalesˮ. Sin embargo, en los últimos dí­as le vienen clavando una confesión golpista y antidemocrática tras otra.

Claro que su postura consecuente a lo largo de la historia, admite algunas contradicciones semánticas como cuando pretenden criticar al gobierno  comparándolo con el régimen nazi  pero a la vez “denuncianˮ que un funcionario es  “judí­o y marxistaˮ.

Sin embargo, hay que admitir que a diferencia de Clarí­n, su socio en Papel Prensa, este centenario diario sí­  le agradece abiertamente a Videla los favores recibidos  y reclama a viva voz lo que Magnetto hace por abajo. Como por ejemplo,  el homenaje a Jorge Quiroga, un juez de la dictadura militar de Onganí­a, Levingston y Lanusse que integraba el “Camarón”, como se le decí­a a la “cámara penal especial” creada por aquella dictadura para juzgar a detenidos polí­ticos.

Esa es la justicia que le gusta a Mitre y a Magnetto, que ahora se siente amenazada por la peligrosa intervención del voto popular. Se oponen a la democratización del Poder Judicial porque se beneficiaron siempre que hubo oscuridad. Son tan soberbios que se sienten dueños de la Justicia como si fuera parte de su propiedad privada. Hasta asumen que les pertenece la Facultad de Derecho de la UBA.

Desde que volvió la democracia, esa Facultad, que es pública, sostenida por el aporte y el esfuerzo de todos los argentinos, viene siendo gobernada por el mismo partido: la UCR. Se ve que para los especialistas en derecho y en constitucionalismo, el tema de la alternancia en el poder vale solamente cuando el que está, representa y defiende los intereses del pueblo. Si en cambio, los que ejercen el poder ininterrumpidamente son ellos, el simple hecho de que los docentes presenten una lista distinta a la de la UCR por primera vez en treinta años, es un atentado contra los pobres y desvalidos dueños de la enseñanza del derecho.

En definitiva, para estos muchachos, como dijo Mitre hace poco, “Vivimos la dictadura de los votos, que es la peor de todasˮ.