Ellos Dicen

Educando al soberano

hqdefaultˮ¦Que los pueblos somos brutos ya lo entendimos. Nos lo vienen repitiendo en la escuela desde siempre. Cuando nos dejaron bien en claro que los gauchos eran malos y los terratenientes buenos, que los inmigrantes italianos y españoles eran vagos y los ingleses y franceses ilustrados, que los trabajadores eran cabecitas negras y los golpistas fusiladores liberales, que los militantes populares eran terroristas subversivos y los torturadores patriotas.

ˮ¦Hay que felicitar al diario La Nación que ayudó tanto en esta titánica tarea de hacernos entender lo bruto que es el pueblo argentino porque es una misión doblemente difí­cil. En primer lugar, porque es muy complicado que uno logre admitir que tiene la culpa de todo, hasta de haber nacido pobre. Pero lo más complicado es que el pueblo logre entender lo bruto que es, justamente porque es bruto. El gran mérito de La Nación a lo largo de sus largos años de generosa enseñanza es, entonces, hacerle comprender a millones de brutos, lo bruto que somos. Imaginensé que mientras más brutos, más difí­cil que entiendan que lo son.

ˮ¦Por suerte todaví­a siguen marcándonos nuestros errores. Es que a veces, el pueblo se olvida y pretende gobernarse a sí­ mismo. Y la última que nos mandamos, realmente, fue demasiado ¿Cómo se nos pudo ocurrir democratizar la justicia permitiendo que millones de brutos elijan lo que vení­an eligiendo los pocos que no lo son?

ˮ¦Si hubiésemos prestado más atención a las clases que nos dan Clarí­n y La Nación, nos habrí­amos dado cuenta de que el problema de la justicia es otro. Así­ como nos dijeron tan didácticamente durante el neoliberalismo que “los problemas de la democracia se solucionan con más democraciaˮ, nos tendrí­amos que haber dado cuenta de que “los problemas de la corporación judicial se solucionan con más corporación judicialˮ. O mejor dicho, para relacionar un poco todo lo aprendido en clases, gracias a la tapa de La Nación de hoy sacamos la conclusión de que: “los problemas de la democracia se solucionan con más corporaciónˮ.

ˮ¦Tarde pero seguro, nos venimos a enterar que, según La Nación, el Poder Judicial tiene que hacer lo que dice un programa de tele. Los fiscales y los jueces no tienen que actuar de acuerdo a la ley sino de acuerdo a lo que el señor Magnetto diga en su programa humorí­stico preferido. Esa serí­a la fuente originaria de legitimidad de la República. Esa es la Justicia independiente que necesita nuestra querida República de brutos.

Muy bien, alumno Capiello. Se ve que viene estudiando mucho para levantar la nota del último boletí­n. Igual, se olvidó de un detalle muy importante. La justicia no tiene que actuar ante toooodas las denuncias mediáticas sino solo las que diga Magnetto y sea medio farandulera. Por ejemplo, si en un diario se denuncia que Clarí­n lava dinero y estafó a millones de jubilados con las AFJP, la justicia debe mostrar que verdaderamente independiente. Independiente de esa denuncia, claro. Si en una radio se cuenta que el diario La Nación le debe a los 40 millones de argentinos, unos 280 millones de pesos, la Justicia debe entender que la libertad de expresión significa evadir impuestos. No seamos brutos, chicos, que eso serí­a populismo mediático-jurí­dico.

Bueno, esto es todo por hoy, brutos queridos. Acuerdensé que tienen como tarea leer a Roa y Van de Kooy que la próxima clase hay prueba sobre odio y resentimiento republicano. Y ojo en el recreo, no los quiero ver jugando al fútbol en el patio del colegio. Para eso hay canchas privadas.

Portada
Las calles argentinas otra vez fueron un espacio de encuentro. Este 23 de abril quedará grabado en la memoria colectiva como el día en el que millones de personas construyeron una verdadera movilización popular reuniéndose en distintos puntos del país con la premisa de defender la educación pública. En esta nota te contamos la marcha desde adentro.
Ambiente
El 22 de abril de 1970 es el Día Internacional de la Tierra gracias a una masiva movilización de estudiantes de todos los niveles educativos y organizaciones de la sociedad civil estadounidense que convocaron a más de 20 millones de personas con un mensaje de conciencia y preocupación sobre el ambiente ante el legado del desarrollo industrial sobre la calidad de vida.