Esta detención se suma a los sucesivos hechos de violencia política contra los que pensamos distinto al presidente Mauricio Macri y su gobierno de Cambiemos: disparos cobardes y anónimos en actividades militantes, la ilegal y arbitraria detención de Milagros Sala, la reciente rotura y violación de la casa de Cristina en Rio Gallegos.
La democracia argentina exige que vuelvan a ser efectivas todas las garantías constitucionales, para todos y todas, y el cese inmediato de la persecución política por parte del gobierno del PRO y sus aliados, ya sea mediante el uso ilegal de las fuerzas de seguridad que deberían velar por la seguridad de todos los habitantes o de fuerzas paraestatales que nos retrotraen tristemente a las épocas más oscuras de la historia de nuestro país.