Buenos Aires

Grave: Detuvieron a un joven de La Cámpora por pedirle a un policí­a que no usara el teléfono mientras manejaba

El hecho ocurrió el lunes por la tarde en la localidad bonaerense de Ayacucho, cuando Iván Di Sábatto se dirigí­a en su bicicleta a colaborar con las tareas que La Cámpora iba a desarrollar en un barrio para ayuda a familias afectadas por el temporal.

El hecho ocurrió el pasado lunes 6 de febrero, cuando el compañero Iván Di Sábato marchaba en bicicleta rumbo a una jornada solidaria que La Cámpora Ayacucho iba a desarrollar en el barrio El Embarcadero, para colaborar con las familias afectadas por el temporal acontecido el dí­a anterior.

“Iba con una escoba y una palaˮ, narró Iván, “y cuando iba por calle Yrigoyen me encuentro con una camioneta policial que no tení­a balizas ni patente, al que yo pasé en bici. Cuando lo pasé vi que el personal que iba manejando iba utilizando su teléfono celular. Con la única mano que tení­a libre porque llevaba en la otra la pala y la escoba, le hice la seña de que no manejara con el teléfono porque era peligroso. A los pocos metros, el patrullero me detiene, me preguntó prepotentemente qué me sucedí­a, si tení­a algún problema, con actitud autoritaria, irrespetuosa, a lo que le dije calmamente que dejara el celular al manejar ya que era un efectivo de Policí­a, ante lo que respondió que hací­a lo que querí­a con el teléfono, que no molestaraˮ.

“Me pidió que me identifique, le di mi nombre y apellido a lo que no me resistí­ y cuando me pidió la documentación, no la tení­a ya que sinceramente iba a una jornada solidaria trabajando en una zanja, en una cuneta y si perdí­a el documentoˮ¦ era entendible. Como no tení­a el documento, agarraron la bici, la escoba, la pala y me cargaron al patrullero y me llevaron al Hospitalˮ, explicó Di Sábato.

Dentro del móvil policial identificado como RO 20958 el temor del compañero fue en aumento. Tanto en el trayecto hacia el Hospital Municipal, como de camino a la Comisarí­a, dos de los tres efectivos policiales que iban a bordo insultaron, increparon y amenazaron con darle una golpiza a Iván, aclarándole que de haber sido “negritoˮ ya le hubieran “molido los huesos a palosˮ.

Cuatro horas después del calvario, a las 19:30, a Iván lo llevaron a la oficina de la oficial a cargo y lo notificaron de que se lo acusaba: “De haber desafiado a la Policí­a, de haber sido yo el prepotente y que me habí­a negado a identificarme, lo que nada de eso pasó. Yo lo único que hací­a era ayudar con una pala y una escoba y pareciera que andar con una remera de una organización polí­tica era el delito. No pude llamar a mis familiares, me sacaron el teléfono. Hubo maltrato verbal y amenazas, que habí­a peleado en la ví­a pública, que habí­a desafiado a la Policí­a con señasˮ.

Al respecto el abogado del compañero, Mario Cuneo, afirmó que a Iván le armaron una causa: “Fue el mismo Comisario que me dijo que Iván firmara la contravención y tampoco sabí­a de qué se trataba. Automáticamente me di cuenta que era una causa armada, le querí­an hacer firmar un acta por una infracción por pelea en la ví­a pública y por la negativa de identificarseˮ.

Silencio municipal

Iván manifestó que, al ser Policí­a Comunal, “la principal lí­nea de mando es el intendente y nunca se comunicóˮ. En efecto, aún el radical de Cambiemos Pablo Zubiaurre prosigue con su silenzio stampa respecto a este graví­simo hecho del cual deberí­a manifestar su repudio teniendo en cuenta los valores republicanos y democráticos.

En esa lí­nea, el diputado provincial del FpV por la Quinta Sección Electoral, José Ignacio “Coteˮ Rossi agregó que “hicimos una declaración de repudio en el bloque del FpV este martes por lo ocurrido y nos dirigiremos hacia la gobernadora Marí­a Eugenia Vidal y el Ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo, para que tomen cartas en el asuntoˮ.

“No queremos pensar que hay una bajada de lí­nea polí­tica, que lo ocurrido en Ayacucho como en otros lados con situaciones parecidas y más graves, donde ha habido agresiones fí­sicas. Queremos que separen del cargo a los oficiales que estamos denunciando, y el Comisario tendrá que dar explicacionesˮ, añadió.

Rossi también reclamó que el intendente “haga pública una declaración de repudio. A mí­ me ha tocado asistir meses atrás a una jornada donde se reivindicaba los Derechos Humanos en Ayacucho y de la mano del mismo intendente se colocaba una placa en homenaje a (la abuela de Plaza de Mayo) Angélica Bauer con presencia de Estela de Carlotto y creo que la defensa de los Derechos humanos tiene que ser siempre, no para una foto o una actividad pintoresca sino siempreˮ.

Estado de excepción

En efecto, detrás de los slogans dialoguistas o las fotos prefabricadas a los que nos acostumbraron Mauricio Macri y Marí­a Eugenia Vidal hay una realidad diferente. Un “estado de excepción tácitoˮ que pone de manifiesto la violencia institucional que ejerce un aparato represivo que perdura en democracia con accionares de la última dictadura cí­vico-militar.

Abusos de autoridad, unidades básicas baleadas, detenciones o demoras por portación de cara o por identidad polí­tica, represión violenta de protestas de trabajadores despedidos, de pueblos originarios, son situaciones cotidianas que sufre la ciudadaní­a desde el 10 de diciembre de 2015 y que se manifiesta también en las escuchas ilegales a Cristina Fernández de Kirchner, en la privación ilegí­tima de la libertad de Milagro Sala y en la persecución polí­tica de la verdadera oposición a la Alianza Cambiemos y su polí­tica neoliberal.

Ciudad de Buenos Aires
El domingo 17 de marzo participamos, por cuarto año consecutivo, de la Marcha de las Antorchas en el barrio de Lugano 1y2 bajo el lema “Iluminemos las calles con memoria” y en unidad con todas las organizaciones del campo popular de la comuna y el Observatorio de Derechos Humanos de la Comuna 8.