Mujeres

Vivas Nos Queremos

La lluvia fue intensa y sostenida durante todo el recorrido de la movilización, pero no fue suficiente para detener a las miles de mujeres y varones que marchamos exigiendo Basta de Femicidios, Ni Una Menos.

La muerte de Lucí­a la joven de 16 años asesinada en Mar del Plata conmovió a la opinión pública, pero la violencia machista es permanente y generó siete  femicidios en la última semana. Por eso una vez más, como el pasado 3 de Junio la sociedad toda se movilizó contra la violencia de gí¨nero.

Desde temprano las redes estallaron con la consigna; de 13 a 14 las mujeres realizamos un paro masivo de actividades en los trabajos, que en muchos casos se convirtieron en reuniones o asambleas para debatir el tema.

Desde las 16 comenzó la concentración en el Obelisco.  Allí­, el Frente para la Victoria marchó en una columna encabezada por diputadas nacionales, provinciales, legisladoras y referentes de las diferentes organizaciones. Las compañeras portaron carteles con consignas contra la violencia machista, denunciando el cierre o vaciamiento de polí­ticas estatales contra la violencia, y con la demanda de libertad a Milagro Sala.

La Plaza de Mayo rebalsó de gente, y muchas columnas no llegaron a entrar, el pedido fue contundente, el cambio social es urgente, no se tolera más violencia, no se toleran más muertes.

Como dijo CFK previo a la marcha: “Es difí­cil que no duela el cuerpo, cuando hay silencio por parte de las corporaciones y de demasiados sectores polí­ticos frente a las polí­ticas que vací­an a nuestro pueblo, y de golpe, nosotras, por nuestra condición de género somos el eje a atacar”.

Vivas nos queremos, pero también nos queremos con derechos plenos, con trabajo digno, con salud y educación, nos queremos sentir libres y seguras en casa y en la calle y nos queremos todas.

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Ante el ajuste de Milei, más organización y construcción de nuevos desafíos para defender y mejorar la educación pública.
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Las Universidades Nacionales de la Argentina atraviesan una situación inédita en la historia: el presupuesto no alcanza para hacer frente a los pagos necesarios para mantenerlas abiertas, corriendo el riesgo de que millones de estudiantes se queden sin estudios, mientras que miles de docentes y no docentes están sufriendo un ajuste brutal en sus ingresos y ven peligrar sus fuentes de trabajo, de las que dependen miles de familias argentinas.