Eso fue lo que le pasó al conductor del noticiero de Canal 13 Mario Massaccesi esta madrugada, cuando al querer congraciarse y quedar bien con el público femenino mientras presentaba la multitudinaria marcha de ayer contra la violencia de género, mostró de manera brutal su verdadero pensamiento sobre el rol que debe ocupar la mujer en la sociedad.
Así, Massachesi mostró, ante miles de personas por la pantalla de TV, el reflejo de lo que todavía miles de hombres debemos trabajar -y mucho- para cambiar.
Es que el lugar donde pone y desde donde piensa a la mujer el periodista, no es ni más ni menos que aquello que debemos cambiar para llegar a una sociedad más justa, libre e igualitaria.
Para Massaccesi no existe otra forma de pensar a la mujer que no sea en la cocina lavando los platos, como secretaria en una oficina o como docente en una escuela. Típicos lugares comunes que debemos desterrar.
Como si las mujeres no pudieran ocupar otro rol que esos que le hemos asignado como propios, y de los cuales -como señala el periodista- sólo pueden escaparse por una excepción, un “paréntesis” (sic) de lo que debe ser su vida diaria.
A su vez, y en el mismo sentido, Massaccesi muestra también el lugar desde donde se para como varón. Es que para él es imposible pensar que si los platos no los lava la mujer los podría o debería lavar el hombre.
En síntesis, si lo que en verdad queremos es desterrar a la violencia de género, lo que debemos empezar a cambiar los hombres no es ni más ni menos que el rol y el lugar donde día a día colocamos a nuestras compañeras.
A veces, antes de intentar quedar bien y simular lo que en verdad no somos, sería saludable reconocer y pedir ayuda en aquellas cosas en las que aún nos falta crecer y madurar.