Se ha vuelto una costumbre de todas las apariciones públicas del presidente pero no por eso debe dejar de causarnos rechazo: desde anoche, los alrededores del Monumento a la Bandera fueron vallados por la policía santafesina y celosamente custodiados por la Gendarmería Nacional.
También como suele ocurrir últimamente, los cientos de personas que se acercaron para manifestarse contra las políticas del gobierno de Cambiemos debieron conformarse con permanecer a más de 300 metros de donde se desarrollaron los actos oficiales por el día de la Bandera.
Aún así, el vallado no fue suficiente para las fuerzas de seguridad que fueron movilizadas hasta Rosario con carros hidrantes incluidos, en especial para la Gendarmería, que decidió avanzar sobre uno de los sectores en el que se encontraban los manifestantes, quienes empujones, golpes y bastonazos, uno de los cuales hirió en la cabeza al concejal Eduardo Tonnioli.
Finalmente, el presidente Macri dio un discurso solo para alumnos, padres y docentes especialmente seleccionados para la ocasión.