Yo Tuve Militando

13D: Tenemos Patria – La Cámpora marchando a Plaza de Mayo

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Los argentinos nos ganamos el derecho a celebrar los 31 años de democracia ininterrumpida y por eso vamos a la Plaza.No vamos a cualquier Plaza sino a la Plaza de las Madres y Abuelas. Y tampoco festejamos un aniversario por el simple hecho de que el calendario determine un nuevo número redondo desde aquel 10 de diciembre de 1983.

Vamos a bancar a la verdadera democracia, aquella que se construye todos los dí­as y se profundiza con conciencia social, con participación y organización popular y con redistribución de la riqueza.

Vamos orgullosos a bancar a la democracia que recuperó a 116 nietos apropiados y condenó a 570 genocidas por delitos de lesa humanidad. Vamos a la Plaza con la certeza de que democracia es inclusión, trabajo y jubilación dignos, crecimiento colectivo material y espiritual.

Vamos con la frente alta porque esta democracia nos permite ejercer nuestra soberaní­a en forma plena, junto a todo al gran pueblo latinoamericano. Con humildad, solidaridad, firmeza y dignidad.

Vamos contentos porque tenemos memoria del pasado, responsabilidad con el presente y compromiso con el futuro. Por eso, también vamos sabiendo que muchos de los que se beneficiaron con la dictadura hoy fugan millones que son de todos los argentinos.

Vamos a bancar a la verdadera democracia. A la democracia que no se somete a las corporaciones ni a una banda de mafiosos que se escudan en su dinero e influencias para extorsionar al pueblo con mentiras mediáticas ni con sus caranchos judiciales.

Vamos porque nuestro pueblo hizo renacer con Néstor un proyecto nacional, popular y democrático y se organiza para seguir profundizándolo de la mano de Cristina.

Vamos a la Plaza porque venimos construyendo un paí­s que recién empieza.

Vamos porque venimos.

Portada
Ante el ajuste de Milei, más organización y construcción de nuevos desafíos para defender y mejorar la educación pública.
Portada
Las Universidades Nacionales de la Argentina atraviesan una situación inédita en la historia: el presupuesto no alcanza para hacer frente a los pagos necesarios para mantenerlas abiertas, corriendo el riesgo de que millones de estudiantes se queden sin estudios, mientras que miles de docentes y no docentes están sufriendo un ajuste brutal en sus ingresos y ven peligrar sus fuentes de trabajo, de las que dependen miles de familias argentinas.