El miércoles 16 de octubre, la Escuela Educación Media N °8 “Julio Cortazar”, ubicada en el Centro de Florencio Varela tuvo elecciones para elegir su Centro de Estudiantes. La lista “Celeste y Blanca” se impuso por 352 votos sobre la lista “Goku”, que sumó 348.Los estudiante que participan en la lista Celeste y Blanca, integrada por militantes de nuestra organización y alumnos independientes, se mostraban emocionados. No sólo por haber llegado a los estudiantes con ideas concretas sino también por el nivel de participación en el establecimiento: de 1000 alumnos que cursan de lunes a viernes, 800 participaron de las elecciones. “Hace un mes que estamos en campaña”, cuenta Laura Leguizamón, presidenta electa del Centro de Estudiantes. “Siempre nos interesó la política, pero decidimos armar una lista y participar porque nuestro objetivo es que los alumnos se incentiven y vean al Centro como una herramienta para hacer valer sus derechos. Hemos tenido una recepción increíble por parte de los alumnos. Nos consultaban mucho, nos planteaban propuestas que les interesaban”.
Las propuestas que la “Celeste y Blanca” planteó al estudiantado fueron:
-Reparación de aulas y baños mediante la participación de alumnos en jornadas solidarias.
-Ampliación de la biblioteca y el armado de talleres culturales para la reparación del material deteriorado.
-Test vocacionales para los alumnos de 6to año del colegio.
-Realización de talleres y charlas informativas con la “Comisión por la Memoria”.
-Banco de juegos para las horas libres.
-Concursos de bandas locales.
-Balances económicos después de cada actividad de recaudación, para generar confianza en los alumnos y autoridades.
La vicepresidenta electa del Centro Rocío Burn, recuerda: “Yo el año pasado me presenté sola y no gané. Pero este año laburando en conjunto con más chicos del colegio, con Laura y el resto de los integrantes de la lista, por fin lo conseguimos. Estar unidos y trabajar en grupo fue lo que posibilitó este momento”.Las porteras echan llave a la puerta de la escuela y todos se alejan. Laura mira a sus compañeros con una sonrisa y dice: “Bueno, ahora a trabajar. Como plantearon Néstor y Cristina cada vez que asumieron un nuevo rol. Tenemos una enorme responsabilidad y mucho compromiso”.
