La presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó la tarde del martes 21 de mayo el acto de inauguración del nuevo edificio de la Biblioteca del Colegio Nacional “Madres de Plaza de Mayo”, en la ciudad de La Plata. Además, entregó fondos para el Hospital Español y netbooks a alumnos secundarios de la capital bonaerense. También inauguró, mediante videoconferencias, obras en Salto, Zárate y la provincia de Salta. Sostuvo que la ayuda a los damnificados por las inundaciones está motivada por “la responsabilidad, el dar la cara, el hacerse cargo y el concebir que la patria es el otro, el que está necesitandoˮ.
Durante su discurso, la compañera Cristina aseguró sobre la inauguración que “se trata de una nueva obra maravillosa, con una inversión del gobierno nacional de más de 3,5 millones de pesosˮ. Y puntualizó que “el gobierno nacional lleva invertido más de 9 millones de pesosˮ en la reconstrucción del histórico Colegio Nacional de La Plata, al que caracterizó como uno de los “lugares emblemáticosˮ de la ciudad. “Esta es plata que ponen todos los argentinos, a través de los impuestos, esto es solidaridad y gestión por parte del estado, frente a la necesidad y a la tragediaˮ, afirmó la Mandataria.
Junto a la militancia unida y solidaria allí congregada, Cristina agradeció ˮa los miles y miles de jóvenes que se desplegaron sobre la ciudad de La Plata, destapando zanjas, llevando ropa, alimentosˮ. Asimismo, agradeció a los miembros de las Fuerzas Armadas que colaboraron en las tareas humanitarias. “Unidos, solidarios y organizados, como debemos estar todos los argentinosˮ, enfatizó.
“Hemos construido mas de 65 casas nuevas entre cooperativistas y jóvenes que han levantado las casas con sus manos, como en los viejos tiempos, dando una mano en los barrios y haciendo muestras de solidaridadˮ, remarcó. Y anunció que se ejecutaron 5 mil ayudas más de las que ya había anunciado por cadena nacional.
Además, aseguró que todos los argentinos y argentinas “siempre van a contar con la mano tendida de un Estado que no se concibe como un engranaje burocrático, no como un lugar para los honores, sino como un lugar de reparación social, de solidaridad, de integración que atraviesa transversalmente a toda la sociedadˮ. Sostuvo que la intención del gobierno es “que cada vez más argentinos y argentinas tengan la posibilidad de ascender socialmente como tuvimos nosotrosˮ.
En otro tramo de su emocionante discurso, Cristina recordó que La Plata “era una ciudad de gente feliz, de gente progresista, donde nos reuníamos en los lugares de discusión, de debateˮ, pero advirtió que durante la última dictadura “fue devastada no solo en lo físico, sino también en lo espiritualˮ.
En ese sentido, se refirió a los jóvenes quienes “tienen la dicha de vivir en un país democrático, en el que pueden decir lo que quieren, votar a quien quieren, y gritar lo que quieranˮ. “Escucho hablar a gente, en algunos medios, que tienen miedo. Miedo era el que teníamos nosotros, ese miedo que se te pone en la boca del estómago y no te deja pensar ni reaccionarˮ. Sostuvo que “era el miedo a desaparecer, a lo que te podía pasar, por el solo hecho de ser joven, o tener algún amigoˮ.
“Hoy afortunadamente nadie puede desaparecer de ningún lado, estamos todos vivitos y coleando, diciendo lo que pensamos y aceptando hasta la injuria, el insulto, el agravio de quienes dicen que nos tienen miedoˮ.
Por eso Cristina recomendó a la juventud que “con la cabeza abierta, con los ojos más abiertos, escuchando, discutiendo, participando, construyendo una argentina en la que los derechos humanos, los derechos sociales y los derechos económicos van de la manoˮ. “No hay que enojarse: primero porque te arrugás, y segundo porque se te agria el alma. Buena onda para todo el mundo, a pesar de los pesares, a pesar de los dolores, aquí estamos de pie los argentinosˮ.
