Durante las tardes de los días viernes 31 de agosto y sábado 1 de septiembre en el barrio Acindar, La Cámpora en Santa Fe y La Cámpora Cultura participaron de los talleres de murga 
que fueron llevados a cabo en la sede de ese barrio del Club Rosario Central de la ciudad.
Los Dandyˮ™s de Boedo, la murga de La Cámpora, con la impronta y alegría que los caracteriza lograron transmitir sus conocimientos en el arte de ser murgueros y fundamentalmente de cómo esa vocación se entrelaza con la militancia volviéndose una sola pasión.
Al comienzo, en un salón que se colmó de niños, jóvenes y sus familias, los Dandys dieron una charla en la cual se habló de la importancia social de la murga, en lo que hace a la inclusión y ayuda de los más jóvenes. Los vecinos del barrio se vieron muy comprometidos en el debate el cual se extendió durante más de una hora, donde los chicos de beodo y los chicos de Acindar compartieron anécdotas, el amor por la música, por la ayuda al otro y lo entusiasmados que se encuentran con la idea de formar la murga en su lugar.
El objetivo de la jornada se desarrolló en base a promover la creación de compañías de carnaval y brindarles a los chicos apoyo a través de talleres de canto, maquillaje artístico, percusión, danza y producción de vestuario, alternando al mismo tiempo con las expresiones locales para puedan articularlo con la vivencia local del carnaval propia de cada territorio. Los compañeros también charlaron acerca de los orígenes del carnaval, como nació, lo que expresaba y el porqué de su prohibición durante la dictadura militar. Luego se hizo hincapié en el resurgimiento de la misma a partir de la vuelta de la democracia, sobre todo desde que este gobierno nacional y realmente popular le devolvió la alegría al pueblo, gracias a nuestra compañera Cristina Fernández de Kirchner que reinstaló el feriado de carnaval.
La gente del barrio y los vecinos estaban felices de tener a profesionales para poder preguntarles todo lo que se les ocurriera. Con mucho entusiasmo los músicos preguntaron cómo mejorar sus instrumentos, las chicas querían conocer nuevos pasos de baile y técnicas para el maquillaje.
Luego de una parte más teórica, comenzó la música que se escuchaba en toda la manzana llamando la atención de todo el barrio. Con respecto al baile al principio los chicos de Acindar estaban tímidos pero sólo hicieron falta unos repiques de tambores para que quisieran aprender los pasos como la bomba, la patada y el alambre.
La pequeña murga que se logró armar, demostró sus conocimientos con los instrumentos de percusión a lo cual le agregaron mucho los Dandyˮ™s con su vasta experiencia. Gracias a sus explicaciones nacieron melodías más lindas que invitaron a acercarse a tocar a más chicos, siempre con el lema de que la murga es un canto de alegría, una demostración de felicidad.
La jornada de talleres y diversión finalizó con muchas caras pintadas de colores y brillos, tambores y mucho baile. “El carnaval es una verdadera reconquista de la alegría popularˮ, tal como afirmó Cristina Fernández de Krichner, así se vivieron las jornadas.
