Desde   las 16:30Hs, los compañeros de Rosario se encontraron  en Oroño y Córdoba para marchar como todos los años juntos al acto central en el Monumento Nacional a la Bandera. Más de 300 jóvenes militantes de La Cámpora de todas las edades, con bombos y redoblantes, canticos y columnas embanderadas de celeste y blanco formaron un tapiz que llamaba a la conciencia histórica, a la rememoración y a no dar ni un paso atrás.

Hoy la memoria colectiva, creada en parte por los militantes que se movilizan, recuerda la mañana del 24 de marzo de 1976, cuando la Junta de Comandantes anunciaba la toma del poder por la cadena nacional de radio y televisión. Aquel 24 de marzo de 1976 comenzó un tiempo donde se  impuso una dictadura que ejerció el terrorismo de Estado que le costó la vida a  30.000 compañeros que luchaban por una Patria más justa e igualitaria. Esa etapa sangrienta de nuestra historia tiene como respuesta una multitud de banderas y militantes, de jóvenes vueltos a la polí­tica que tiñen de alegrí­a y de color una fecha para la reflexión de toda la sociedad.

Este año la marcha volvió a ser multitudinaria al igual que el año anterior, pero no siempre fue así­ recuerda un viejo militante sumado recientemente a los compañeros de Rosario: “Antes los actos fueron menos ruidosos, menos atestados de gente. En este 24 resulta difí­cil oí­rse y caminar por las calles de la ciudad por la gran cantidad de murgas, banderas y bengalas que son acompañados por cientos de personas que arengan cantos históricos de la lucha por los Derechos Humanos.ˮ

Fueron Néstor y Cristina, como parte de una generación diezmada sistemáticamente, que fue castigada con dolorosas ausencias, quienes demostraron que era posible cumplir con fuertes ideales aquellos sueños que quisieron derrotar.

Sin dudas en estos años algo ha cambiado, la historia de la Argentina tiene como hito histórico el momento en que, reasumiendo como Comandante en Jefe de las fuerzas armadas, Néstor   dijo “procedaˮ, ordenando descolgar el cuadro de Videla del Colegio Militar. Esto significo perder los miedos profundamente arraigados, fundamental para revivir la partición polí­tica del pueblo como herramienta de expresión y cambio. Néstor aparece como garantí­a contra las dictaduras, como la profundización de la democracia y el fortalecimiento de las Instituciones vapuleadas durante anteriores periodos.

Es por estas razones que los compañeros y un pueblo entero le dicen a Néstor, “Bajando un cuadro formaste milesˮ. En el Dí­a de la Memoria, la verdad, la justicia, la soberaní­a y la democracia, los compañeros cantaron sin parar hasta el final del acto en que las abuelas de la plaza de mayo de Rosario brindaron sus palabras a una inmensa cantidad de gente que colmó las escalinatas del Monumento decididos a que el “Nunca Másˮ se perpetúe en un “Nunca Menosˮ.