El martes 17 de enero de 2012 quedará grabado como el día que las Madres de Plaza de Mayo llegaron a su ciudad para
realizar un juramento de fidelidad al Compañero Néstor Kirchner.
Fue un día de mucha emoción colectiva. Desde temprano, los compañeros esperaron el momento de arribo de las Madres organizando su recepción. Dejando la casa tan linda como la visita esperada. La voluntad de siempre se veía multiplicada por la emoción.
Cerca de las siete de la tarde un minibus que paró en la puerta del local de la calle Estrada transformó en aplausos al silencio. Llegaron las Madres. Una a una, fueron bajando y atravesando un pasillo de sonrisas y ojos brillosos que las guió al interior del salón que ya se encontraba colmado.
Fue una reunión tan informal como emotiva, que transcurrió entre mates, bizcochos, aplausos, risas y lágrimas. El compañero diputado provincial Matías Bezi fue quién le dió la bienvenida al grupo de Madres encabezado por la presidenta de la Asociación, Hebe de Bonafini, a la primer unidad básica que La Cámpora tuvo en el país para acompañar este proyecto político. “Es un gran honor poder contar con la presencia de ustedes. Nos enorgullece muchísimo, todos conocemos de su lucha, sobre todo la búsqueda de Justicia sin rencor desde hace casi 35 años. Hoy cuando las estábamos esperando en el aeropuerto era muy grande la emoción. No hay muchas palabras. Son una gran parte de la historia de nuestro país”, concluyó.
Hebe contó el porqué de la visita a Río Gallegos: “La palabra homenaje no me gusta. Es un ‘juramento de fidelidad’ de las Madres a lo que él nos dio, que dijo que éramos sus Madres. Se me ocurrió que teníamos que venir acá a rescatar, a ver. No solamente tenemos que ver dónde nació San Martín, Belgrano. Tenemos un héroe, un patriota, que hizo algo único que es de esta época. Las Madres, que estamos viejas porque tenemos todas más de 80, sentimos que teníamos que venir a conocer sus lugares donde él pensó lo que quería y llevárnoslo. Es la primera vez que no vamos a marchar en la Plaza de Mayo un jueves. Hace 35 años que no faltamos a la marcha. Hemos hecho en otros lugares pero siempre había Madres que marchaban en Buenos Aires. Esta vez decidimos venir todas las que estamos un poquito más paraditas, y decidimos hacer este compromiso, esta fidelidad, de marchar aquí por él y para él.ˮ
La emoción colectiva colmó el local y se dejaba ver en los rostros de los presentes. Los ojos brillosos ya no eran exclusividad de los compañeros que escuchaban con atención como Hebe transformaba sus lágrimas, y las de sus compañeras, en palabras:ˮLas Madres estamos felices de que haya tantos jóvenes en la militancia. Sé que se van a equivocar muchas veces porque el que hace siempre se equivoca pero si lo miramos a él todo el tiempo, y si nos damos cuenta cuántas cosas nos dejó y nos dijo, vamos a ser mejores, que es lo que quería él. Luchen por los otros, chicos: no quieran nada para ustedes. Eso fue la cosa más hermosa que nos enseñó Néstor.ˮ
En las casi dos horas de charla también hubo espacio para que los presentes comentaran historias relacionadas a la actividad política de Néstor en la ciudad y expresaran su admiración y respeto a la lucha de las Madres que este 2012 cumplirá 35 años declarándole un juramento de fidelidad al Compañero Néstor Kirchner, un prócer de nuestra época.
