Organismos de Derechos Humanos conmemoraron los ocho años de la nulidad de las leyes de impunidad y resaltaron los avances en el juicio y castigo por los crí­menes de lesa humanidad.

En la tarde de ayer se colmo el auditorio de UTE en la Capital Federal, durante la charla convocada por la agrupación H.I.J.O.S, bajo el lema “A 8 años de la nulidad de las leyes de impunidad: balances y desafí­osˮ.

Del encuentro participaron Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Lí­nea Fundadora; Lita Boitano, de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Polí­ticas; Eduardo “Wadoˮ de Pedro, querellante en la causa ABO y miembro de La Cámpora, y Horacio Pietragalla, de Abuelas de Plaza de Mayo.

La primera oradora fue Lita Boitano, quien hizo un recorrido cronológico por los años de impunidad y concluyó: “Casi lloro por ver la cantidad de años que pasamos con impunidad, luchando y sin respuestas…ˮ.

 Después de ella habló Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Lí­nea Fundadora, quien señaló que “Estamos recordando la nulidad de esas leyes infames, que hicieron que echara raí­ces la impunidadˮ. Recordó que “dictaron las leyes, pero no nos quedamos paralizadas, seguimos exigiendo. Vino el que le siguió a Alfonsí­n e indultó a los pocos que habí­an sido condenados. Los deja en libertad por un decreto presidencial y tuvo la osadí­a de querer tirar abajo la ex ESMA y hacer un gran parque de la reconciliaciónˮ. Luego dedicó un tiempo para recordar la jornada histórica del 21 de agosto de 2003, cuando se declaró la nulidad de las leyes de impunidad: “Veí­amos a los 30 mil con los pulgares arriba diciendo vamos viejas, lo lograron. Qué importante llorar de alegrí­aˮ.

El siguiente orador, Eduardo “Wadoˮ de Pedro, recordó que el terrorismo de Estado de la Dictadura cí­vico militar dejó una huella tan profunda en el pueblo argentino, que generó la negación de la memoria, la verdad y la justicia.

“Fueron veinte años muy duros -continuó Wado-. Yo milité en H.I.J.O.S desde el 97, porque más allá del dolor por las perdidas personales, habí­a un dolor permanente que era el de la impunidad. Pero ese dolor tení­a una cura: exigir justicia y militar para conseguirlo”.

De Pedro sostuvo además que para su generación, la de los hijos de desaparecidos, la llegada de Néstor fue un alivio, porque al impulsar la anulación de las leyes de impunidad les permitió a las ví­ctimas del terrorismo de Estado ser querellantes en los juicios.

“Eso es algo que le debemos a la lucha de las Abuelas, las Madres y los Familiares, pero también a Néstor y Cristina, que pusieron todas sus fuerzas y sus principios para enfrentar a las corporaciones que colaboraron durante 20 años de democracia con la impunidad de los genocidas. Son las mismas corporaciones que en estos años se la pasaron diciendo que el gobierno usa a los organismos de derechos humanos, las que tienen de voceros a Duhalde, y las que nosotros vamos a seguir investigando cuando tengamos la oportunidad de ser diputados”.

Para finalizar, Wado sostuvo que “así­ como Néstor y Cristina son los que nos garantizaron el Nunca Más, con las transformaciones polí­ticas, sociales y culturales, nosotros tenemos que garantizar ahora el Nunca Menos del que nos habla nuestra Presidenta”.

Vale destacar que De Pedro y Pietragalla, son hijos de desaparecidos y candidatos a diputados nacionales por el Frente Para la Victoria.

Fue justamente Horacio Pietragalla, nieto que recuperado que confirmó su identidad en abril de 2003, quien habló en cuarto lugar. En su intervención, Horacio enumeró a cada uno de los nietos, hijos de desaparecidos, que recuperaron su identidad desde 2003 para concluir que “esa fue la respuesta de Néstor y Cristinaˮ.

Asimismo se destaco   el apoyo de los organismos de Derechos Humanos a los candidatos   a diputados Pietragalla y de Pedro, que integran las listas del Frente para la Victoria.

En el cierre, Charly Pisoni, de H.I.J.O.S.: “Fuimos ganando las batallas, una a una. Lo imposible puede ser posible si uno persevera y resiste. Acá están nuestras queridas Madres, Abuelas, Familiares y Padres. Y qué mejor ejemplo que tomar esto para ir por másˮ. Y agregó: Nosotros no olvidamos, no perdonamos y tampoco nos reconciliamos, pero nunca alcanza, y por eso tampoco nos conformamos. Vamos por los civiles, los grupos económicos. Falta mucho, vamos por más. Por eso desde los organismos llamamos a apoyar a estos candidatos a diputados del Frente para la Victoriaˮ.

En 2003 las leyes de Obediencia Debida y Punto Final fueron anuladas. En 2005 fueron declaradas inconstitucionales. Esto abrió la posibilidad histórica de juzgar y condenar los crí­menes del terrorismo de Estado. A ocho años de esa primera decisión polí­tica que derribó los muros de la impunidad, más de 230 genocidas fueron condenados.